Las TIC como motor de innovación en la empresa

Si para algo ha servido esta crisis es para que en España se tome conciencia de la importancia de la innovación y la excelencia empresarial como factor clave para lograr el bienestar en un país. Atrás quedó el que inventen los otros y el siglo largo de autarquía con una industria volcada en los mercados cautivos de las colonias y luego en los aranceles para proteger el mercado interno. Antes la excelencia era una cuestión de supremacía, hoy en día se ha convertido en una cuestión de supervivencia.  No podemos dormirnos en los laureles.

Prueba de ello tenemos a Japón, otrora líder indiscutible de la electrónica de consumo, hoy en día literalmente barrido del mercado por surcoreanos y chinos.  Nada es para siempre.. En la guerra por los mercados no hay ninguna fortaleza segura,  ni ninguna batalla ganada de antemano.

El papel de las tecnologías de la información

Las TIC, juegan un papel clave en la empresa moderna. El sistema nervioso de una empresa está formado por sus sistemas de información. De ellos depende el funcionamiento fluido y dinámico de una empresa que le permite ser competitivo y mantenerse en unos mercados cada vez más exigentes. También han de ser los principales cambios tanto a nivel interno como externo,  que han de tener como consecuencia cambios en la estrategia de la empresa.
Las TIC no han de tener como objetivo  el llenar nuestras oficinas de pantallas y cables, sino eliminar las montañas de papel y burocracia que separan a empresas, clientes, jefes, empleados y departamentos.  También han de ser el soporte para una gestión más científica  de la empresa, con decisiones más basadas en hechos que intuiciones.

Innovando mediante las Tecnologías de la información

Una de las múltiples maneras de innovar es mejorar las cosas que fallan. Esto es algo sencillo de decir pero muy difícil de lograr. Para poder detectar potenciales áreas de mejora es necesario disponer de información muy fiable, que confirme o desmienta nuestras intuiciones.

Es muy arriesgado lanzarse a la piscina sin datos, aunque muchas veces el ingrediente principal de grandes invenciones como la gasolina y los ordenadores personales ha sido la intuición. No está de más el disponer de algún dato que nos permita corroborarlo.