Aplicaciones móviles a medida, ventajas de la transformación digital

Existen áreas de la empresa donde el personal se encuentra en constante movimiento. Un ejemplo son las empresas constructoras, donde en diferentes momentos los jefes de obra, los aparejadores, etc. se encuentran a pie de obra, aplicable asimismo a despachos de arquitectos o a empresas de proyectos de ingeniería donde parte del personal necesita estar fuera de la oficina.

Este entorno pasa a ser el lugar de trabajo donde más tiempo pasan, lejos de un despacho, de un escritorio o de un ordenador, sin poder acceder a los sistemas que un trabajador utilizaría en una oficina.

Los ordenadores portátiles solventaron ese bache, pero siguen siendo voluminosos y algo pesados para llevarlos encima en todo momento. Sin embargo, otros dispositivos móviles como tablets o smartphones, cumplen las funciones de centro de trabajo con un volumen y un peso reducidos.

El problema es que los programas empleados en las empresas (ERP, CRM, programas financieros y de contabilidad…) están diseñados para correr en ordenadores “comunes”, no en dispositivos móviles. Para ello, es necesario el uso de aplicaciones específicas para estos dispositivos.

Estas aplicaciones son un aspecto clave de la transformación digital de las empresas, otorgando la movilidad y el acceso a los sistemas necesarios a los profesionales que se encuentran sobre el terreno, lejos de una oficina.

Algunos programas de gestión tienen aplicaciones móviles para sus diferentes áreas (agenda comercial, gestión de almacenes, listas de tareas para proyectos…) descargables en las tiendas de aplicaciones de las diferentes plataformas (Android, iOS, Windows…) pero están limitadas a los estándares del área escogida, sin estar adaptadas a las modificaciones realizadas en la empresa ni a las necesidades específicas de la misma.

No obstante, se pueden crear aplicaciones a medida, orientadas a roles de usuario. Aplicaciones que aúnan diferentes áreas y las combinan de la manera más cómoda para llevar a cabo la actividad profesional que se requiera, y se comunique con los sistemas de información de la empresa.

El potencial de estas “nuevas” aplicaciones es mayor que el de las aplicaciones estándar, ya que permite su personalización en función de la actividad desempeñada, adecuándose a las necesidades del usuario y permitiendo la comunicación con los sistemas de gestión de la empresa.

Con ello se consiguen entonces dos propósitos: solventar la problemática de la movilidad, y adaptar totalmente la solución al grupo de profesionales involucrado, aprovechando así las ventajas que la transformación digital ofrece a las empresas.